domingo, 31 de mayo de 2015
miércoles, 31 de diciembre de 2014
Confianza
Confianza
(D.
H. Lawrence)
Tenemos que volver a confiar
el uno en el otro
en las cosas más esenciales.
Y no hablo de la estrecha y
pequeña
confianza que afirma
ventajosa:
“Seré para ti, si tú eres
para mí”.
Sino de una confianza mayor,
de confiar en el sol
que no se turba
ante polillas o herrumbre,
al que vemos brillar
el uno en el otro.
No me confíes,
ni tampoco me cargues
con tu vida y asuntos;
no me arrastres a tus
cuitas.
Mas creo que puedes confiar
en el sol que hay dentro de
mí,
que reluce con tanto brillo
como ves en mí,
y no con más fulgor.
Pero si calienta
lo más vivo
del fondo de tu corazón,
entonces confía en él,
pues forma una lealtad más.
Así pues, sé un sol para mí,
no una personalidad
cansada e insistente,
sino un sol que brilla
y se oscurece, y relumbra
de nuevo, y se entrelaza
con la luz del sol
que hay dentro de mí
hasta que ambos
seamos más gloriosos
y brillemos como el sol.
© de la traducción al castellano: Ricardo José Gómez Tovar
Trust
Oh we’ve got to trust
one another again
in some essentials.
Not the narrow little
bargaining trust
that says: I’m for you
if you’ll be for me. -
But a bigger trust,
a trust of the sun
that does not bother
about moth and rust,
and we see it shining
in one another.
Oh don’t you trust me,
don’t burden me
with your life and affairs; don’t
thrust me
into your cares.
But I think you may trust
the sun in me
that glows with just
as much glow as you see
in me, and no more.
But if it warms
your heart’s quick core
why then trust it, it forms
one faithfulness more.
And be, oh be
a sun to me,
not a weary, insistent
personality
but a sun that shines
and goes dark, but shines
again and entwines
with the sunshine in me
till we both of us
are more glorious
and more sunny.
domingo, 23 de noviembre de 2014
Amar mi cuerpo
Aprendí a amar
mi cuerpo.
a aceptar sin
ira sus límites
a aceptarle
cada día en sus cambios
a amar su
reflejo en el espejo.
Aprendí a amar
mi cuerpo
cuando duele
cuando el
corazón palpita acelerado
cuando está
extenuado.
Aprendí a
aceptarle
también a
escucharle
a interrogarle
en mis
proyectos integrarle.
Aprendí a
escuchar las sensaciones
escondidas en
sus células
voces de
sentimientos ahogados
en las
moléculas perdidos
al final liberados, expresados,
sanados.
Él me enseña a
colaborar
a vivir en el
presente
a no forzar y
fluir
él me enseña a
amar.
Él ha enseñado
a mi mente rebelde
a no ser tan
independiente,
le ha
recordado que hay una unidad
en la cual el
Universo basado está.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)